08/05/18 – Luego de 54 años ininterrumpidos de trayectoria artística, Carmín Vega se retira. Y en simples palabras explicó que “la vida de un artista está llena de retos y sacrificios, que en unas épocas de la vida se manejan mejor que en otras”.

En su concierto de despedida este pasado fin de semana, demostró que su retiro tiene lugar en su mejor momento. Aún conserva una voz impecable, una presencia escénica envidiable y una belleza clásica, acentuada por el maravilloso vestuario que utilizó especialmente para este evento, y que ella misma confeccionó.

El concierto abrió con algo que dejó a todos boquiabiertos, y que algunos pensaron que se trataba de un elemento de comedia del show. Pero luego nos enteramos de que la historia real era diferente.

Resulta que alguien metió el dedo en donde no debía y se escuchó una grabación en la que se anunciaba que “el honorable alcalde Jorge Santini Padilla, les da la más cordial bienvenida al Teatro Tapia”. La gente, por supuesto, río a carcajadas. Aunque posiblemente a la que no divirtió el chiste debió haber sido a Carmen Yulín Cruz, cuando le contaron el chisme.

Pero volviendo a la reseña del espectáculo, Carmín lució deslumbrante en su número musical de apertura. Vistiendo un elegante traje azul, nos llevó a rememorar el paso del tiempo y la vida. Luego de algunas interpretaciones, presentó en tarima a Oscar Solo, quien lució como en su mejor momento al vocalizar su recordado éxito “Nube Gris”. El público se unió al artista formando un coro impresionante, que le impartió una energía muy especial a la velada.

Carmín, ataviada al estilo de los años ’60’s, se unió a su invitado para llevar a los asistentes en un recorrido musical por los grandes éxitos de La Nueva Ola. En esta parte, integró a los estudiantes de la escuela de baile de Cuca Casanova. Este elemento resultó adecuado, pues es importante que los artistas profesionales den paso a las nuevas generaciones. De esta forma se conocen y valoran los estilos y vertientes que fueron la base de lo que tenemos hoy en el ambiente artístico. Es fundamental que se den estos juntes entre artistas nuevos y clásicos, para que esa historia musical no se pierda.

La segunda parte del show se dedicó a las imitaciones de cantantes. Algunas estuvieron mejor logradas que otras. Pero como la misma Carmín Vega explicó, ciertas voces son más fáciles de lograr y con el tiempo, más aún. Pero en términos generales, la sección fue divertida y nostálgica.

El cantante, compositor y músico Junior Laredo – parte central de la sección dedicada a la bohemia – ha trabajado junto a Carmín Vega por 39 años, lo que motivó a la cantante a aprovechar el momento para reconocer su trayectoria. Junior también deleitó con unas interpretaciones musicales que elevaron al auditorio al séptimo cielo. Verdaderamente, es un excelente intérprete al que muchos anhelarían ver más a menudo en los escenarios.

En esta velada no podía falta Edgardo Huertas, quien se integró al grupo demostrando nuevamente que posee una de las voces más versátiles y privilegiadas de nuestros escenarios. Su interpretación de “Amnesia”, nos hizo a todos olvidar de que ya habían transcurrido más de dos horas de show. Porque ver a Edgardo Huertas en escena es siempre un momento muy grato.

El también presentador reconoció el apoyo que recibió Carmín de parte de la productora Ivonne Class para hacer realidad el evento. Muchos reconocen que, a través de todos sus años en la industria del entretenimiento, Ivonne ha respaldado siempre el talento puertorriqueño. Sin ella, la noche no hubiera logrado la mágica alcanzada.

El espectáculo llegó a su fin con la interpretación de del tema “Me Llevaré”, seguido de “Por Amor”.

Carmín Vega demostró que sigue siendo dueña y señora de los escenarios. Su voz está intacta y, de no ser porque decidió retirarse de los escenarios, podríamos afirmar que hay Carmín Vega tiene muchos años por delante para seguir deleitando a sus seguidores.

Por Tisha Cabral